Consumo y ahorro de energía y agua en el jardín
Con la llegada del buen tiempo vamos a empezar a usar mucho más el jardín y la zona exterior de nuestra vivienda. Por ello, el consumo de energía en nuestro jardín empezará a subir. Debido al alto coste de la electricidad en nuestro país, es importante reducir al máximo el consumo de electricidad, así como de agua.
Durante este artículo te contamos cómo ahorrar energía y agua en tu jardín. Te proponemos una serie de recomendaciones para que puedas reducir el consumo de electricidad en el jardín de tu casa y sepas cómo maximizar el ahorro de agua y otros recursos. Aprende a ser eficiente energéticamente y ahorra en tus facturas de luz con estos consejos.
Conoce tus necesidades energéticas e invierte en tu sistema eléctrico
Si tu vivienda cuenta con un jardín o una zona exterior, se debe tener en cuenta en el momento de dar de alta la electricidad, por la potencia que se necesitará. La distribución del sistema de iluminación se debe planificar para cada zona del exterior de tu vivienda, buscando el ahorro y la eficiencia energética al máximo. Además, debes tener en cuenta la elección de la potencia de luz correcta, puesto que, cuanta más potencia contratada, más se paga en la factura de electricidad.
Además, también es importante planificar bien el sistema de riego y de desagües de tu jardín, buscando reducir el consumo de agua y evitando problema de acumulaciones que puedan llevar a un mayor consumo o a averías más graves.
Consejos para reducir el gasto y el empleo de recursos en tu zona exterior
Para reducir el consumo de energía y agua en tu zona exterior puedes seguir esta serie de consejos:
- Seleccionar adecuadamente las especies de plantas: no todos son recomendables para algunos tipos de jardines en el momento de economizar recursos y garantizar su supervivencia. Hay que tener en cuenta las condiciones climatológicas de la zona donde vives, el tamaño de tu zona exterior y el tiempo del que dispones para cuidar de tus plantas.
- Invierte en sistemas de riego inteligentes: son sencillos de programar para activarse en horario nocturno (así podremos ahorrar agua puesto que no se evaporará, sobre todo en verano). Un sistema inteligente se puede controlar de manera remota desde cualquier lugar.
- Instala luminarias LED: Este tipo de luminarias consume casi un 80% que las bombillas tradicionales y bastante menos que los fluorescentes y los halógenos. Si bien es cierto que son más caras, su poco consumo las convierte en una gran inversión. Hay que elegir la potencia en vatios de cada bombilla en función de las dimensiones de cada área y el tono de la luz que deseemos.
- Instala sensores de movimiento con luz nocturna: este tipo de sensores hacen que la luz se encienda si detectan la presencia de alguien. Con ellos evitarás que se queden encendidas las luces cuando no haya nadie en el jardín.
- Otra opción para ahorrar es que las luminarias funcionen con energía solar, la cual es totalmente gratuita. Suelen contar con baterías para que puedan funcionar en ausencia de radiación solar.